Cómo afrontar el retorno al ejercicio después de una lesión
Volver a la rutina cuanto antes es un deseo inevitable al sufrir cualquier tipo de lesión, pero es muy importante que afrontes el retorno al ejercicio de manera adecuada, ya que la etapa de adaptación física también forma parte de tu recuperación.
Entonces, ¿qué pasa una vez te recuperes? ¿Se puede volver a hacer ejercicio con normalidad tras una lesión? ¿Qué hay que tener en cuenta?
Entendemos que volver a la actividad física después de un tiempo de rehabilitación es un paso crucial, por eso a continuación te contamos todo lo que necesitas saber para afrontar sin miedo de nuevo este desafío.
PASOS PREVIOS ANTES DE AFRONTAR EL RETORNO AL EJERCICIO DESPUÉS DE UNA LESIÓN
El proceso de recuperación de una lesión no concluye una vez dejas el cabestrillo o las sesiones de fisioterapia atrás, sino que continúa con tu vuelta al entrenamiento, al cual has de adaptarte poco a poco. Por eso ha de ser progresiva y segura.
El deporte ya forma parte de la vida de una gran parte de la sociedad, nos ayuda a incrementar nuestra calidad de vida, a desconectar, a aliviar tensiones. No podemos dejar que ninguna lesión nos desanime y acabemos dejándolo de lado, pero hay ciertas cosas en cuenta antes de retomar la normalidad:
- Consulta a un profesional: nosotros contamos con un gran equipo de expertos que te ayudarán no solo a recuperarte de tu lesión, sino a volver a darlo todo. Para ello, es imprescindible contar con una evaluación de tu fisioterapeuta antes de iniciar cualquier entrenamiento y así garantizar tu seguridad.
- Establece objetivos realistas: con esta evaluación podremos trabajar juntos para establecer objetivos realistas, entendiendo que cada lesión y cada paciente son un caso único, por lo que tus metas deben ir acorde con tu situación. Definir un plan alcanzable es esencial tanto para tu futuro bienestar como para tu motivación y constancia. ¡Queremos que veas resultados!
- Escucha a tu cuerpo: para establecer esas metas y llegar a ellas sin frustración debes atender al comportamiento de tu cuerpo. Identificar las señales que te envía, distinguir entre un dolor normal por un ejercicio y aquel que podría indicar que estás traspasando tus límites es muy importante. Recuerda que él es quien manda, y de su estado y seguridad dependerá la adaptación de tu plan de ejercicios. Deja que se vaya adaptando poco a poco.
CÓMO PLANIFICAR TU ENTRENAMIENTO TRAS UNA LESIÓN
Crear un plan de ejercicios es un paso fundamental para garantizar un regreso seguro y efectivo a la actividad física. Por eso trabajamos contigo para desarrollar un entrenamiento específico que se vaya adaptando a tus necesidades y restricciones individuales.
- No abandones por completo la actividad física: algo que puedes ir haciendo mientras te recuperas es trabajar el resto del cuerpo, por ejemplo, si tu lesión es de rodilla, puedes ir entrenando el tren superior. Así, el retorno al ejercicio será menos trabajoso y podrás ir introduciendo poco a poco la parte afectada de nuevo.
- Enfócate en tu zona lesionada: es importante que al volver al entrenamiento dediques más tiempo a la parte lesionada y que incluyas un buen estiramiento en tu rutina enfocándote sobre todo en esa zona.
- Haz énfasis en el calentamiento: tanto el estiramiento como el calentamiento son partes esenciales de cualquier entrenamiento. Saltarse cualquiera de los dos o hacerlo demasiado por encima puede convertirse en un gran factor de riesgo.
- Márcate metas a corto y a largo plazo: aunque la rehabilitación consiste en recuperar la movilidad en la zona afectada, el periodo de inactividad acaba pasando factura. Como debe ser un proceso progresivo debes marcarte metas tanto a corto como a largo plazo, sin exigirte demasiado muy pronto y sin forzar el cuerpo. Lo justo y necesario para que vayas notando el progreso. Ten en cuenta que el periodo de adaptación dependerá del tiempo que hayas estado inactivo recuperándote.
- No olvides llevar un registro: esto se convertirá en una herramienta poderosa a la hora de mantener la motivación y poder evaluar tu recorrido en la recuperación.
Visualizar cómo vas alcanzando cada meta te permitirá celebrar cada logro.
PREVENIR ES MEJOR QUE CURAR
Si eres una persona activa y aficionada al deporte conocerás sus beneficios, pero también debes saber lo importante que es prevenir las lesiones asociadas a su práctica.
Cualquier tipo de lesión puede suponer un enorme obstáculo en tu rutina, tanto deportiva como doméstica. La recuperación toma tiempo y paciencia, además de un tratamiento adecuado. La inseguridad, la espera, la inactividad, la incertidumbre… todo ello puede hacer que incluso afecte a nivel mental.
Por eso está claro cuál es la mejor solución a cualquier lesión: la prevención. Si bien sabemos que no es posible viajar al pasado, si que lo es atender al presente. Una lesión leve puede empeorar muy fácilmente si no se atiende a los primeros síntomas, por eso es necesario que bajes el ritmo y acudas cuanto antes a un especialista.
Por otro lado, también forma parte de una buena prevención entender bien cuáles han sido las causas de nuestra lesión, para así saber si se puede evitar que vuelva a ocurrir algo así en el futuro. ¿Mal calentamiento? ¿Levantar peso de más? ¿Descompensaciones? En el origen de tu lesión vas a encontrar información muy útil para tu futura rutina.
¡EMPIEZA YA!
Como ya hemos mencionado, afrontar el retorno al ejercicio después de una lesión forma parte de tu recuperación y por eso también te acompañamos durante este proceso. Aunque puede ser desafiante, con la orientación adecuada y unos objetivos realistas con tu situación, puede convertirse en un camino muy gratificante.
Recuerda siempre que lo más importante es escuchar a tu cuerpo y contar con el tiempo necesario para volver a una vida activa y saludable. Y contando con verdaderos profesionales que te acompañen durante este viaje, evitando recaídas y afecciones mayores, una recuperación exitosa estará más cerca cada día.
La traumatología deportiva es la especialidad que garantiza que puedas volver a tu rutina sin perder tu condición física, por eso ¡cuenta con nosotros! Pide cita a través de este link y juntos diseñaremos un protocolo de readaptación a tu medida.