Cuidados después de una cirugía de rodilla

Una cirugía de rodilla es un procedimiento médico que requiere seguir cuidados postoperatorios adecuados para asegurar una recuperación exitosa. A través de estos cuidados, se busca minimizar el dolor, reducir la hinchazón, restaurar la movilidad y fortalecer la rodilla. 

Cada caso es distinto, por lo tanto, es fundamental seguir las instrucciones y recomendaciones específicas proporcionadas por el médico. Con el cumplimiento adecuado de los cuidados postoperatorios, se puede lograr una buena recuperación y una vuelta a la normalidad, sin complicaciones.

En el post de hoy te cuento cuáles son los cuidados después de una cirugía de rodilla, cuánto dura la recuperación y cuáles son los ejercicios recomendados después de la cirugía.

¿Qué es una cirugía de rodilla y qué tipos hay?

La cirugía de rodilla es un procedimiento médico que se realiza para tratar diversas afecciones y lesiones en la articulación de la rodilla. Algunas de las cirugías de rodilla más comunes son:

1. Cirugía artroscópica de rodilla: Es nuestro procedimiento estrella, ya que es mínimamente invasivo. Se inserta una pequeña cámara llamada artroscopio a través de pequeñas incisiones en la rodilla. Esto permite al cirujano ver el interior de la articulación y realizar reparaciones o correcciones, como la reparación de meniscos, ligamentos o cartílago dañado.
2. Reemplazo total de rodilla: Es realizada cuando la articulación de la rodilla está dañada debido a la artritis u otras condiciones degenerativas. En este procedimiento, se reemplaza la articulación de la rodilla con una prótesis, que sustituyen las superficies dañadas del hueso y permiten un buen movimiento.
3. Osteotomía: Se realiza cuando hay deformidades o alineación incorrecta de la rodilla. En la cirugía, se lleva a cabo un corte en el hueso para cambiar su alineación.
4. Artroplastia de revisión: Es una cirugía realizada para reemplazar o corregir una prótesis de rodilla anterior que ha fallado o se ha desgastado con el paso del tiempo.
5. Reparación de ligamentos: Se realiza  esta cirugía cuando uno o más ligamentos de la rodilla, como el ligamento cruzado anterior (LCA) o el ligamento colateral medial (LCM), están lesionados. El cirujano suele utilizar tejido de la propia persona o injertos de tejido donado, para reparar o reconstruir los ligamentos.

Es importante destacar que, el tipo de cirugía de rodilla recomendada dependerá del diagnóstico específico y de la evaluación del médico especialista. 

Además, cada procedimiento conlleva riesgos y complicaciones potenciales, por lo que es fundamental discutir con el médico los beneficios, las opciones y los posibles riesgos antes de realizarla.

Recuperación de una cirugía de rodilla

Una vez realizada la operación, deberás seguir los cuidados adecuados para facilitar la recuperación de una cirugía de rodilla y evitar complicaciones. A continuación, te cuento algunas pautas que pueden ser útiles, pero recuerda siempre seguir las instrucciones específicas de tu médico:

1. Descanso y elevación: Durante los primeros días después de la cirugía, es importante descansar y no realizar mucha actividad física. Eleva la pierna en la que se ha realizado la operación, para así reducir la hinchazón y mejorar el flujo sanguíneo.
2. Vendajes y aplicación de frío: Utiliza vendajes o una manga de compresión para controlar la hinchazón. Además, aplicar hielo en la zona, envuelto en una toalla, durante unos 15-20 minutos varias veces al día, puede llegar a reducir el dolor y la inflamación.
3. Medicamentos: Toma los medicamentos recetados indicados por tu médico. Estos medicamentos pueden incluir analgésicos para el dolor y antiinflamatorios para reducir la inflamación.
4. Fisioterapia: Es probable que se te recomiende realizar ejercicios de rehabilitación y fisioterapia para fortalecer los músculos alrededor de la rodilla y mejorar la movilidad. Sigue las indicaciones del fisioterapeuta y realiza los ejercicios de forma regular.
5. Cuidado de las incisiones: Mantén las incisiones limpias y secas para evitar infecciones. Sigue las instrucciones de tu médico sobre cómo cuidar y curar las heridas.
6. Uso de muletas: Es posible que necesites utilizar muletas, un bastón o una rodillera durante un tiempo para apoyar la pierna y reducir el peso sobre la rodilla mientras se recupera.
7. Alimentación y nutrición: Sigue una dieta equilibrada y consume alimentos ricos en nutrientes, estos ayudarán a fortalecer los tejidos y a una buena recuperación.
8. Evitar actividades de alto impacto: Evita la flexión de la rodilla después de la cirugía, así como actividades físicas intensas, deportes de contacto y movimientos bruscos que puedan poner en riesgo la rodilla. Sigue las recomendaciones de tu médico sobre cuándo es seguro volver a realizar actividades físicas regulares.
9. Seguimiento con tu médico: Realiza las citas de seguimiento programadas y comunica cualquier problema o síntoma que puedas experimentar durante el proceso de recuperación.

Cada persona es única y los cuidados después de la cirugía de rodilla pueden variar dependiendo del tipo de cirugía realizada y las características individuales. 

¿Cuánto dura la recuperación de una cirugía de rodilla?

La recuperación después de una cirugía de rodilla puede ser distinta dependiendo del paciente y el tipo de procedimiento realizado, puede durar desde unos meses hasta un año.

En la primera semana, se suele tener dolor, inflamación e incluso limitaciones a la hora de realizar cualquier movimiento de la zona operada. Es posible recetar medicamentos para reducir este dolor e inflamación. Asimismo, al ser la movilidad más reducida, deberás utilizar muletas o un bastón para apoyar la rodilla operada al caminar. 

Más adelante, el médico te recomendará cuándo comenzar a poner peso sobre la pierna operada e iniciar terapia física y ejercicios para mejorar el equilibrio y fortalecer los músculos. La fisioterapia será una pieza importante en la recuperación de una cirugía de rodilla y las sesiones pueden variar según el paciente.

Cabe añadir que, dependiendo del tipo de cirugía de rodilla, podrá haber hospitalización, es decir, si se trata de una artroscopia simple, recibirás el alta el mismo día. En cambio, si se trata de una reparación de ligamentos o la cirugía es más compleja, se recomienda un ingreso de 24 horas. Se te proporcionará medicación para el dolor y se realizarán controles para asegurar que la recuperación está avanzando correctamente.

Es fundamental que tengas paciencia y sigas las instrucciones de tu médico durante todo el proceso de recuperación. Cada persona se recupera a un ritmo diferente, por lo que será primordial respetar los tiempos para conseguir una buena recuperación y evitar complicaciones.

Ejercicios después de una cirugía de rodilla

Después de una cirugía de rodilla, será importante realizar ejercicios de rehabilitación para promover la recuperación, fortalecer los músculos y mejorar la movilidad de la rodilla. Sin embargo, es importante destacar que los ejercicios pueden variar dependiendo del paciente, el tipo de cirugía realizada y las indicaciones de tu médico o fisioterapeuta. 

Algunos de los ejercicios más comunes que se pueden realizar después de una cirugía de rodilla son:

-Ejercicios de movilidad: Se trata de movimientos suaves de extensión y flexión de la rodilla, tanto sentado como de pie. Estos ejercicios ayudan a mejorar el rango de movimiento de la articulación.

-Ejercicios de fortalecimiento muscular: Ayudarán a fortalecer los músculos alrededor de la rodilla.. Algunos ejercicios incluyen:

• • Contracciones isométricas: Aprieta los músculos de la pierna sin mover la rodilla. A continuación, mantén la contracción durante unos segundos y luego relaja.
  • Ejercicios de cuádriceps: Flexiona el pie hacia arriba y estira la pierna mientras contraes los músculos del muslo. Luego, baja la pierna lentamente.
  • Ejercicios de isquiotibiales: Flexiona la rodilla hacia el glúteo, mantén esa posición durante unos segundos y luego vuelve a la posición inicial.
  • Ejercicios de glúteos: Realiza contracciones de los músculos de los glúteos apretándolos y manteniendo la contracción durante unos segundos. A continuación, relaja.

-Ejercicios de equilibrio y estabilidad: Estos ejercicios ayudan a mejorar el equilibrio y la estabilidad de la rodilla. Algunos de estos ejercicios pueden ser: unipodal (apoyarse solamente sobre una pierna), uso de una plataforma de equilibrio, etc.

-Ejercicios aeróbicos de bajo impacto: Si tu médico lo aprueba,  puedes comenzar a hacer ejercicios aeróbicos de bajo impacto como: caminar o pedalear en una bicicleta estática. Estos ejercicios ayudarán a mejorar la resistencia cardiovascular y fortalecer los músculos de la pierna.

Es muy importante realizar los ejercicios de manera correcta y de forma gradual, siguiendo las indicaciones de tu médico o fisioterapeuta. Si sientes alguna molestia o dolor inusual durante la realización de los ejercicios, no dudes en consultarlo con un profesional.

A modo de conclusión, podemos afirmar que, la recuperación después de una cirugía de rodilla es un proceso gradual que requiere tiempo, paciencia y compromiso por parte del paciente. 

Siguiendo las indicaciones y recomendaciones de tu médico y equipo de rehabilitación, puedes maximizar tus posibilidades de una recuperación exitosa. Si tienes alguna preocupación o experimentas síntomas inusuales durante la recuperación, no dudes en comunicarte con tu médico para recibir asesoramiento adicional.

Nosotros somos especialistas en lesiones y cirugías artroscópicas de rodilla, por lo que si deseas concertar una cita con nosotros, podrás pedir una cita aquí y valoraremos tu caso.